10/10/2024
Los estudiantes y docentes , impulsados por la defensa de sus derechos y el futuro de la educación pública, parecen estar liderando una batalla que quizás la CGT no se atreve a dar con la misma intensidad. Todo en un clima que cada vez se pone más tenso en las marchas contra los militantes libertarios.
La reciente movilización de docentes y estudiantes en defensa de la universidad pública tras el veto del gobierno de Milei ha puesto en evidencia una disyuntiva clave en la dinámica de lucha social en Argentina.
Mientras los estudiantes se han volcado masivamente a las calles, organizando protestas y manifestaciones enérgicas, surge la pregunta de si la CGT y los sindicatos tradicionales están eludiendo tomar medidas de fuerza con la misma contundencia.
La CGT y el embajador de EEUU
El papel de los estudiantes como actores principales en esta lucha sugiere que ellos, a diferencia de la CGT, no temen confrontar de manera directa las políticas del gobierno. ¿Será que las centrales sindicales, históricamente asociadas con la resistencia obrera, están adoptando una postura más cautelosa o incluso complaciente frente a este nuevo contexto político?
En contraste, los estudiantes y docentes , impulsados por la defensa de sus derechos y el futuro de la educación pública, parecen estar liderando una batalla que quizás la CGT no se atreve a dar con la misma intensidad. En un clima que cada vez se pone más tenso en las marchas contra los militantes libertarios.
Esta situación plantea una reflexión más profunda sobre la actual correlación de fuerzas en el movimiento social argentino: ¿Están los sindicatos, que tradicionalmente han encabezado luchas por los derechos laborales y sociales, cediendo terreno ante la creciente movilización estudiantil? Y de ser así, ¿podría esto ser un indicio de un nuevo ciclo de protagonismo juvenil en la resistencia social?
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