Paro de controladores aéreos amenaza con afectar vuelos en todo el país durante las fiestas

Los controladores aéreos nucleados en la Asociación de Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (ATEPSA) anunciaron un plan de lucha progresivo que podría afectar los vuelos nacionales en todos los aeropuertos del país durante las fiestas de fin de año, con la posibilidad de extenderse también a los vuelos internacionales si no hay respuestas a sus reclamos.

Las medidas comenzarán el miércoles 18 de diciembre y apuntan contra la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA), a la que el sindicato acusa de incumplimientos salariales, desconocimiento del convenio colectivo de trabajo y falta de diálogo. Según ATEPSA, la empresa no respetó un acuerdo paritario firmado meses atrás, lo que dejó los salarios por debajo de la inflación.

En una asamblea realizada en EANA Central, los trabajadores expresaron su rechazo a la falta de instancias de negociación y denunciaron que, pese a los compromisos asumidos, la empresa se negó a reabrir la discusión salarial. Desde el gremio sostienen que el conflicto se agravó luego de que se agotara la conciliación obligatoria dictada en agosto, sin que se alcanzaran soluciones concretas.

El sindicato informó que el cese de actividades será progresivo y que inicialmente impactará sobre los vuelos de cabotaje. En caso de persistir el conflicto, las medidas podrían ampliarse al tráfico internacional, en uno de los períodos de mayor demanda aérea del año. ATEPSA adelantó que en los próximos días realizará asambleas nacionales para definir horarios, modalidades y alcance de las acciones.

Desde la organización gremial remarcaron que el plan de acción se inició el 3 de noviembre y se reactivó ante la ausencia de respuestas por parte de EANA. "Meses sin respuestas, salarios atrasados y un convenio colectivo que la empresa sigue desconociendo", señalaron para justificar la profundización del conflicto.

Por su parte, desde EANA aseguraron que el paro no está confirmado, afirmaron que el convenio se encuentra vigente hasta diciembre y negaron la existencia de atrasos salariales. Sin embargo, no dieron señales de modificar su postura, lo que refuerza la posibilidad de que el conflicto escale en plena temporada alta.

La expectativa ahora está puesta en la audiencia prevista en la Secretaría de Trabajo, que buscará acercar posiciones. En el sector no descartan que el Gobierno recurra nuevamente a una conciliación obligatoria, una herramienta utilizada de forma reiterada para desactivar medidas de fuerza puntuales, lo que podría postergar el conflicto hacia enero, también en un contexto de alta circulación aérea.

Mientras tanto, el anuncio del paro genera preocupación en el sector turístico y entre los pasajeros, ante la posibilidad de demoras y cancelaciones durante las celebraciones de fin de año, en un escenario marcado por la tensión entre reclamos salariales y la política oficial de contención de conflictos laborales.